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Stories told by Śrīla Prabhupāda - Historias narradas por Śrīla Prabhupāda
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<< 25 The boy who would not give up sweets >>
<< 25 El chico que no renunciaría a los dulces. >>
 | And this is another nice story “The boy who would not give up sweets”. A woman brought a child to see a saintly person. She told the sadhu: “The doctor informs me that my child is a diabetic and he must stop eating all kinds of sugary sweets. But in spite of what I tell him he won’t stop. Since you are a saintly person I am sure that if you tell him to stop eating sugar and sweets, he will listen and his life can be saved.” Surprisingly to that woman, the sadhu replied that he could not tell the child to stop eating sweets on that day. He said: “Bring the child back after four days.” The mother was a little disturbed by this. “Why he can’t tell my child right now? Four more days my child will eat sweets, this is not good. But anyway,” she thought, “he is a saintly person, so I should do what he said”. But she was really disturbed in her mind about this. Then after four days she brought her child back and then the child sat in front of the sadhu and the sadhu said to him in a very grave voice, very seriously: “You must stop eating sweets.” And the child was very profoundly affected by these words and he bowed down at the sadhu’s feet and said: “Yes, I promise from this day on, I will never eat sweets again. This is my promise to you.” Then the mother was very surprised and she asked: “Please swamiji, tell me why is it, that four days ago you would not tell my child this and now today when I brought the child you were so speaking with such determination, so seriously that it completely changed my child’s heart?” The sadhu replied: “You see, on that day you came – four days ago, I myself was eating sweets. Therefore I had to give up the sweets myself. Now I can tell this child with complete seriousness and no hypocrisy – don’t eat sweets and it has effect”.
| | Y esta es otra bonita historia "El niño que no renunciaría a los dulces". Una mujer trajo a un niño para ver a una persona santa. Ella le dijo al sadhu: “El médico me informa que mi hijo es diabético y que debe dejar de comer todo tipo de dulces azucarados. Pero a pesar de lo que le digo no se detendrá. Como eres una persona santa, estoy seguro de que si le dices que deje de comer azúcar y dulces él te escuchará y su vida puede salvarse”. Sorprendentemente para esa mujer, el sadhu respondió que no podía decirle al niño que dejara de comer. dulces en ese día. Él dijo: "Traiga al niño de regreso después de cuatro días". La madre estaba un poco perturbada por esto. "¿Por qué no puede decirle a mi hijo ahora? Cuatro días más mi hijo comerá dulces, esto no es bueno. Pero de todos modos", pensó," él es una persona santa, así que debería hacer lo que dijo". Pero estaba realmente perturbada en su mente sobre esto. Luego, después de cuatro días, trajo a su hijo de regreso y luego el niño se sentó frente al sadhu y el sadhu le dijo con voz muy grave, muy en serio: "Debes dejar de comer dulces". Y el niño se vio muy profundamente afectado por estas palabras y él se inclinó a los pies del sadhu y dijo: “Sí, lo prometo, a partir de hoy nunca volveré a comer dulces. Esta es mi promesa para ti". Entonces la madre estaba muy sorprendida y preguntó: "Por favor, Swamiji, dime por qué, que hace cuatro días no le dijiste esto a mi hijo y ahora, cuando traje al niño, eras tan hablando con tanta determinación, tan en serio que cambió por completo el corazón de mi hijo". El sadhu respondió: "Ya ves, ese día que viniste, hace cuatro días, yo mismo estaba comiendo dulces. Por lo tanto, tuve que renunciar a los dulces yo mismo. Ahora puedo decirle a este niño con total seriedad y sin hipocresía: no coma dulces y tiene efecto".
| | | So moral – example is better then precept. Precept means principles, speaking principles, but to set the example of those principles is more important. A leader cannot tell the public to stop smoking for instance, if he himself smokes. He should practice himself first. Then he becomes acharya.
| | Entonces la moraleja: el ejemplo es mejor que el precepto. Precepto significa principios, principios de habla, pero dar el ejemplo de esos principios es más importante. Un líder no puede decirle al público que deje de fumar, por ejemplo, si él mismo fuma. Debería practicarse primero. Luego se convierte en acharya.
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