| The words nāma-rūpāṇi viṣamāṇi refer to the system of varṇāśrama-dharma, in which members of human society are designated according to four social and four occupational divisions. Those dedicated to intellectual or religious perfection are called brāhmaṇas, those dedicated to political perfection are called kṣatriyas, those dedicated to financial perfection are called vaiśyas, and those dedicated to eating, sleeping, sex and honest work are called śūdras. Such propensities arise from the three modes of material nature (goodness, passion and ignorance), because the pure soul is not materially intellectual, ambitious for power, enterprising or servile. Rather, the pure soul is always absorbed in loving devotion to the Supreme Lord. If the various propensities of a conditioned soul are not engaged in the varṇāśrama system, they will certainly be misused, and thus that person will fall down from the standard of human life. The Vedic system is designed by the Lord so that conditioned souls may pursue their individual achievements and at the same time advance toward the ultimate goal of life, Kṛṣṇa consciousness. Just as a doctor deals with a crazy man by speaking to him sympathetically in terms of his false conception of life, one who understands the Vedic literature engages the living entities according to their illusory identification with the elements of matter. Although all material bodies are composed of the same material elements and are thus qualitatively identical, as described here by the word sameṣu, the Vedic social system, varṇāśrama, is created to engage all human beings in Kṛṣṇa consciousness according to their various degrees of material identification. The absolute good is the Supreme Lord Himself, and that which approaches the Supreme Lord becomes similarly good. Because the sun is the source of heat within this world, an object that approaches the sun becomes hotter and hotter until it merges into fire. In the same manner, as we approach the transcendental nature of the Personality of Godhead, we automatically become surcharged with absolute goodness. Although this knowledge is the real basis of the Vedic literature, mundane piety is enjoined and sin is prohibited so that one can gradually come to the platform of material goodness, whereupon spiritual knowledge becomes visible. | | | Las palabras nāma-rūpāṇi viṣamāṇi se refieren al sistema varṇāśrama-dharma, en el que los miembros de la sociedad humana se clasifican según cuatro divisiones sociales y cuatro divisiones ocupacionales. Quienes se dedican a la perfección intelectual o religiosa se denominan brāhmaṇas, aquellos que se dedican a la perfección política se denominan kṣatriyas, aquellos que se dedican a la perfección financiera se denominan vaiśyas, aquellos que se dedican a comer, dormir, tener relaciones sexuales y trabajar honestamente se denominan śūdras. Esas propensiones surgen de las tres modalidades de la naturaleza material (bondad, pasión e ignorancia), porque el alma pura no es intelectual en lo material, ni ambiciosa de poder, ni emprendedora ni servil. Más bien, el alma pura siempre está absorta en la devoción amorosa por el Señor Supremo. Si las diversas propensiones de un alma condicionada no se emplean en el sistema varṇāśrama, es seguro que se las empleará mal, en consecuencia, esa persona caerá del nivel de la vida humana. El sistema védico fue diseñado por el Señor para que las almas condicionadas puedan perseguir sus logros individuales y al mismo tiempo, avanzar hacia la meta suprema de la vida, el proceso de la Conciencia de Kṛṣṇa. Tal como un médico trata a un loco hablándole con compasión en función de su falsa concepción de la vida, aquel que entiende las Escrituras védicas ocupa a las entidades vivientes conforme a su identificación ilusoria con los elementos de la materia. Aunque todos los cuerpos materiales están compuestos de los mismos elementos materiales y por lo tanto, son cualitativamente idénticos, como se describe aquí con la palabra sameṣu, el sistema social védico, varṇāśrama, fue creado para ocupar a todos los seres humanos en el proceso de Conciencia de Kṛṣṇa conforme a sus diversos grados de identificación material. El bien absoluto es el propio Señor Supremo, aquello que se acerca al Señor Supremo se vuelve igualmente bueno. Como el Sol es la fuente de calor de este mundo, un objeto que se acerca al Sol se vuelve cada vez más caliente hasta que se funde en fuego. De la misma manera, a medida que nos acercamos a la naturaleza trascendental de la Personalidad de Dios, automáticamente nos volvemos sobrecargados de bondad absoluta. Aunque este conocimiento es la verdadera base de la literatura védica, se ordena la piedad mundana y se prohíbe el pecado, de modo que uno pueda llegar gradualmente al plano de la bondad material, en el cual se hace visible el conocimiento espiritual. | |